sábado, 27 de junio de 2015

El mono desnudo y su jaula de hierro




El partido comunista debería ya comenzar a mirarse en el espejo del KKE ( Partido comunista griego). Sus estructuras orgánicas, doctrinas puristas y estrategias políticas, ya no arrastran a nadie en este Mundo. Y es que la gente se da cuenta que, al igual que los sindicatos llamados mayoritarios, lejos de innovar y dar pasos hacia un nuevo Mundo, se han convertido en sub-estructuras que forman parte del sistema, en cuanto se han burocratizado, recrean siempre los mismos escenarios y no poseen dentro de su proyecto elementos de renovación necesarios para sorprender o convencer a los no adeptos, ¿adictos?

Weber sentó las bases argumentales de lo que T. Parsons tradujo como "jaula de hierro" y que explica el fenómeno de la burocracia como un hecho ineluctable de las organizaciones civiles o públicas en su devenir. Un halo sutil que envuelve y encierra en la inoperancia a todo lo que toca y que para algunos solo puede salvarse mediante la contínua autocrítica, apertura a la sociedad y necesarias refundaciones.

Son muchos los que quieren explicar cualquier fenómeno social, económico o político, buscando en las páginas ajadas del maestro de su tiempo Karl Marx, a estas alturas ya, fundador de una doctrina por obra y gracia de sus seguidores doctrinarios y de su iglesia burocrática a tenor de las “novísimas” organizaciones comunistas. ¡Algo tendrá el capitalismo actual que no pudo ver Marx en el S.XIX ! Algunos pensamos que el materialismo histórico es una gran aportación del maestro, que no gran sacerdote y mucho menos profeta a la historia, que ha empoderado a los revolucionarios durante décadas, sin embargo también que la dialéctica histórica necesita hoy de estrategias diferentes a las trazadas por sus acólitos seguidores.

El caso es que las doctrinas y las iglesias siempre fueron bienes de inestimable valor para los que las poseen o las prodigan, a buen recaudo mantenidas por esas personas que no quieren avanzar en las explicaciones, que abominan la innovación y las nuevas alternativas, que cuando sufren crítica reaccionan airadamente e incluso afirman que el problema es siempre de que la ciudadanía no les sigue, que tienen que recrearse en un tiempo histórico para poder sobrevivir en sus púlpitos y poltronas, porque si no el rio de la vida se les lleva, les arrastra como material de desecho.

El PCE ha tratado de controlar todo lo que ha adoptado y ese ha sido uno de los principales lastres que ha tenido Izquierda Unida. Las utopías siguen su curso y la utopía del S.XIX no es en absoluto el molde de la del S. XXI, pero sobre todo los procedimientos y estrategias para conseguirla sí que no son los de antes y lo que nos falta hoy es un proyecto estratégico para hacer posible la emancipación humana. Si alguien lo tiene que  lo diga, ¿El PCE? por favor seamos realistas... No me extraña que Pablo Iglesias y en general los de Podemos no quieran coaligarse con una IU que arrastraría hacia la unión con Podemos al PCE en pleno. Bufff ¡que mal sueño para Podemos! Pero ¡ojo! Pablo y amigos, que la jaula de hierro puede también encerraros a vosotros en su acogedora seguridad contra los “extraños”. Procurar no dejar de estar con un pié en las calles y otro en las instituciones. Lo que diseñásteis como círculos de diálogo y factoría de proyecto ciudadano no puede ser dilapidado por la socorrida “responsabilidad de Estado o institucional” ahí hay que tejer una red de mutuas complicidades y ese es un reto imperativo para cualquier proyecto de cambio, ya que el poder democrático tendrá que apoyarse en la ciudadanía para confrontarse al poder económico, su base de legitimidad y poder son los ciudadanos y ciudadanas y nunca ha de separarse de quien le encumbra en el ejercicio de sus funciones, ya no valen mandatos cada 4 años, lo serán cotidianos o gobernará la plutocracia del dinero.

Lo que está claro es que para comenzar a caminar hoy hay que ir reprogramando la acción a cada dificultad insalvable, que son muchas, y para ello hay que contar con la gente, no la podemos perder por el camino. No consiste en hacer uso de una doctrina y llegar antes, sino en llegar a tiempo al sitio donde hemos de estar, con la suficiente masa crítica para vencer y cambiar el signo de los tiempos.

La imagen del mono encerrado en su jaula representa una acertada visión de quien no se refunda y asume una doctrina, está desarmado frente al Mundo pero sigue vociferando herido de lógica indignación. El deber de quienes arman nuestro discurso es el de prestarnos palancas para ponerlo a trabajar para avanzar eficazmente, mediante una  techné o "máquina de guerra" precisa. En el caso de los sacerdotes, como en el de los sindicatos mayoritarios o el PCE, fundamentalmente orientan bastantes veces sus estrategias para hacer ver que son imprescindibles y conservar sus poltronas en beneficio propio, ya que no han sido capaces de reformular un proyecto de emancipación para los trabajadores y trabajadoras mínimamente posible, pero sobre todo porque no han gestionado bien desde su inoperancia en las últimas décadas y quieren hacernos creer que han sido imprescindibles. Alberto, compañero de ATTAC ¡Vete ya a Podemos y con los que buenamente puedas! muchos te lo agradeceremos.

Antonio Fuertes Esteban
Barcelona, 27 de junio de 2015

3 comentarios:

JesRHYCARD dijo...

Redondeando o señalando los substantivos que se usan y especialmente los verbos que se conjugan en un texto ensayístico o articulo pronto se encuentran las pistas de la linea de pensamiento de su autoría. Es decir, antes de encontrar la explicación de una tesis o tomarse el debido tiempo para entenderla -si es necesaria una o mas relectura- esas redondelas de las keywords permiten ubicar pronto la posición de autor. De alguna manera esas palabras actúan como pseudolapsus, aun mas si se repiten a lo largo de un texto mas largo, es así que el verbo “arrastrar” para definir la capacidad de convocatoria de una sigla indica una potencia de movilización del estilo de lo que hacen las caballerías con los carros, la locomotora con los vagones o un partido de corte leninista con las masas subyugadas por sus consignas y prosas. Afirmar que un partido se tiene que replantear su existencia y organización porque ya no arrastra a la gente no es muy distinto del planteamiento comercial de una productora que se cuestiona su producto que no pasa del merchandising y cuyas latas caducan por falta de compra o clientes La diferencia entre el mercado de los productos y el campus de proposición de las ideas es que aquellos pueden ser sustituidos por otros de otra factura que cubran las necesidad mientras que estas no son reemplazables ¿o sí?. Veamos cuales.

Jes RICART

Res Publica Global dijo...

bien, no es mala crítica agarrándose a una palabra.

Res Publica Global dijo...

No obstante yo soy más de lo libertario. El arrastre es cásico de las locomotoras y los adalides de la revolución bolchevique. Va por ellos y su método lo de arrastre.Creo que efectivamente nuestros tiempos son más de anarquía y teoría del Kaos. Es por eso que cuesta tanto crecer con férreas disciplinas leninistas.