ATTAC ACORDEM
A.- Situación actual de las finanzas:
Las finanzas constituyen el
suministro dinerario necesario para la economía de mercado. En una democracia,
la economía habría de servir a los intereses de las personas y las finanzas
habrían de reunir un conjunto de principios y controles democráticos. Sin
embargo, las finanzas capitalistas se han constituido al servicio de las
grandes corporaciones y capitales, antes que de las sociedades en su conjunto.
El ordenamiento financiero de la
UE se rige por unos principios básicos: Principio de maximización de las
finanzas privadas, o de privatización. Principio de competencia (en principio
libre y no falseada, aunque en la práctica no sea así). Principio de libertad
absoluta de movimientos de capital y por la opacidad para las grandes
transferencias de capital.
La desregulación de la economía a
partir de finales de los 70 rompe con los controles sobre el mercado y
capitales que existían desde la posguerra y la liberaliza. Con el neoliberalismo
las finanzas adquieren enorme proporción sobre el conjunto de la economía y se
hacen autónomas de ella, llegándose a la hiperinflación financiera y a un
descontrol generalizado. Este descontrol alimentó la crisis financiera de 2008
y la posterior recesión económica, que continuamos sufriendo.
El sistema
bancario:
El
sistema bancario en España es hoy mayoritariamente privado, a
excepción de Bankia y de la Sareb. Heredamos de la dictadura diversos bancos
públicos que estuvieron al servicio de su etapa expansiva desarrollista y que
puestos al servicio de la democracia hubieran podido ser en potencia fuente de
desarrollo y bienestar para la ciudadanía, pero los gobiernos del PSOE primero
y después fundamentalmente del PP los fundieron y privatizaron en la operación
BBV-Argentaria. El gobierno del PP promueve asimismo medidas que suponen obstáculos
a la democratización financiera que significa la existencia de entidades de
crédito cooperativas y/o solidarias.
Posteriormente,
en 2013 y después de un periodo de reestructuración paulatina, la Ley de Cajas
de Ahorro y Fundaciones Bancarias transformaba a las Cajas de proximidad en
fundaciones bancarias privadas, con las características generales de los bancos
actuales y como estos con la posibilidad de concentrar las competencias como
banca de ahorro y banca de inversión en las mismas entidades. El objetivo de la
reestructuración del sistema bancario español en su conjunto viene marcado
desde instancias de la UE y tiene como objeto converger en 5 o 7 grandes
entidades sistémicas que supongan más del 90%, sino la totalidad del negocio
bancario.
Desde
el momento en que se gestó la crisis, hasta la actualidad, la escasa vigilancia
supervisora del Banco de España sobre el desarrollo de la burbuja financiera y
sobre los procesos de fusión y bancarización de las cajas de ahorro ha sido
determinante en la crisis del sistema financiero, sobre una base, claro está,
de desregulación y liberalización del sector consecuente con las directrices de
la UE y las nimias normas reguladoras internacionales de Basilea II y III.
Las
normas de regulación internacionales del Comité de Supervisión Bancaria de
Basilea, constituyen un uso desproporcionado del mecanismo de reserva
fraccionada de los bancos, estableciendo entre un 6 y un 8% la reserva de “core
capital” que los bancos han de poseer en caja del total del valor de los
activos emitidos. Siendo este un mecanismo clásico del ilícito enriquecimiento
de los bancos con la base de los depósitos de la ciudadanía, no es menos cierto
que la mayoría de bancos tampoco cumplen con estas mínimas normas regulatorias
establecidas desde Basilea, las propias normas contables se lo posibilitan.
El
mecanismo de reserva fraccionada se produce desde la propia creación del
sistema bancario y está originado por el mero hecho de la existencia de
instrumentos financieros diversos, uno de los cuales es el papel moneda y otros
los diversos títulos que los bancos emiten, creando dinero bancario, no dinero
moneda que es competencia en Europa del BCE. La desregulación ha supuesto la
búsqueda continua de liquidez de las entidades financieras, haciendo uso para
ello del exceso de titulización y aprovechando los bajos tipos de interés y la
falta de límites al apalancamiento crediticio. El abuso de productos
financieros derivados ha creado una profunda inestabilidad en las finanzas
mundiales. Muchos de ellos, productos tóxicos, han llevado al Crash de 2008 y
una profunda recesión que supone desde hace años profundas heridas a nivel
social, aumento del paro y de las desigualdades y un retroceso de los derechos
humanos y en la ecología.
También
la banca ha hecho y sigue haciendo uso de malas prácticas bancarias, comisiones
abusivas, productos estafa como las preferentes. Se supone al mismo tiempo que
el mercado logrará que los gestores privados guiados por su propio interés de
ganancia actúen acuerdo al interés social. Es evidente que no es así, altos
directivos se asignan ganancias desproporcionadas incluso cuando su entidad
tiene pérdidas y/o está a punto de quebrar.
El
proceso de concentración y oligopolización bancaria significa una vuelta de
tuerca que traslada rentas desde el trabajo hacia el capital bancario, lo que
se ha venido llamando apropiación de las ganancias y socialización de las
pérdidas. Ello convierte a los grandes bancos en entidades “sistémicas”
demasiado grandes para quebrar, por lo que los estados acaban impidiendo su
quiebra y convirtiendo su deuda privada en deuda pública.
Es
de suma importancia la construcción del Banco central Europeo y los objetivos
que se le han asignado dentro de la UE. En primer lugar es asombrosa su independencia
política respecto de la UE. Sus funciones principales son de control de la
inflación y de emisión de moneda, pero no tiene como funciones ni el
crecimiento económico ni la creación de empleo. Este estatuto del BCE es un
obstáculo insalvable para que la UE pueda constituir algún día una verdadera unión
económica y política.
Inversores
institucionales y su actividad especulativa:
Aparte
de los grandes bancos y de las Cajas de Ahorro, existen otros inversores
institucionales, con autonomía propia si bien muchas veces coaligados a estos
mismos bancos de diversas formas. Hablamos de los diversos fondos inversión; de
las grandes aseguradoras internacionales; de los grandes fondos de pensiones
que recorren invirtiendo las bolsas mundiales; de las sociedades e
instituciones de inversión colectiva, como Sicav,s y otras; de las Socimi,…etc.
Los
gestores de todos estos grandes inversores institucionales han sido durante
décadas los máximos agentes de especulación con activos diversos, buscando el
beneficio rápido, pero habiendo de asumir riesgos y poniendo a las economías en
riesgo. Ello se ha dado a nivel de productos financieros y con moneda, a nivel
inmobiliario, con la deuda de los estados y los productos alimenticios y
recursos básicos, invirtiendo en bolsa, comprando empresas diseccionándolas y
vendiéndolas después de su reconversión…, etc.
La
paulatina transformación de una economía productiva en una economía
especulativa ha supuesto una metamorfosis sustancial dentro del sistema
capitalista; el capitalismo productivo ha mutado en capitalismo financiero que
supone una economía virtual y depredadora.
La
especulación se impone a la empresa y se ha instalado en el flujo económico, de
tal forma que por cada unidad de flujo dinerario que circula en la economía
real circulan más de 80 unidades destinadas a la especulación cortoplacista no
productiva. Este sector financiero es el que más beneficios obtiene, es 26
veces más rentable que todos los demás, pero a su vez no paga apenas impuestos.
A su vez es frecuente observar en las memorias de grandes compañías cómo en
gran parte sus beneficios proceden de su inversión financiera, más allá de su
objeto productivo. Así que las entidades financieras ponen actualmente barreras
al crédito a empresas y familias, ya que la especulación les proporciona más
beneficios.
El
dinero, la banca y algunos instrumentos financieros son elementos útiles y
necesarios en una economía moderna. Sin embargo, su mayoritaria privatización, su
crecimiento indiscriminado y abuso con fines de enriquecimiento especulativo
tiene efectos desestabilizadores sobre la economía real (crisis, desocupación,
aumento de las desigualdades)
La economía, la
opacidad y los sistemas jurídicos offshore:
La
opacidad es hoy uno de los mayores obstáculos para el necesario control y
democratización de las finanzas. Impide la transparencia necesaria para hacer
posible la rendición de cuentas, la supervisión consolidada y el control
ciudadano.
Prácticamente
los mayores flujos financieros, que se dan a nivel internacional entre bancos y
otras instituciones financieras, permanecen ocultos mediante instrumentos de
transacción, registro y pago opacos. La vuelta de tuerca a la opacidad son los
refugios fiscales y financieros, que con sus sistemas jurídicos offshore suponen
una serie de problemas importantes para la economía mundial: Incentivan y
protegen el delito económico, la corrupción y la delincuencia organizada. Crean
descontrol en la banca y las finanzas, amenazando la estabilidad financiera. Posibilitan
el fuera de balance y alimentan la banca en la sombra y los riesgos sistémicos.
Minimizan los ingresos fiscales de los estados. Y están en el centro de la crisis presupuestaria
actual que socava el estado democrático y social. Aumentan la pobreza y la
desigualdad. Así mismo incentivan la criminalidad organizada, la corrupción y
el terrorismo a nivel internacional.
La fiscalidad y la
emisión de deuda pública. Dos fuentes financieras de los estados.
Los
impuestos son la base de financiación de los estados modernos. En la Unión Europea
ha habido una regresión importante de la fiscalidad de los estados después de
la crisis, ello es debido por una parte a la disminución de la masa salarial
consecuente con el aumento del paro y la reducción de los salarios y del
consumo; pero también a que el impuesto de sociedades se ha desmoronado en la
última década debido al trato de favor impositivo de los estados hacia las
grandes empresas y también y muy especialmente debido a la elusión y evasión
fiscal de estas utilizando los refugios fiscales.
El
sistema fiscal español está 6 puntos por debajo en recaudación que la media de
la Unión Europea. Además el 83% de la carga impositiva corresponde a familias y
solo un 12% a empresas. Son las familias y el trabajo quienes abastecen los
presupuestos generales del Estado, siendo mínima la contribución del capital y
las empresas.
Los
impuestos y otros ingresos corrientes habrían de ser suficientes para financiar
el gasto público en circunstancias normales. Aunque los países han de poder
utilizar eventualmente los déficits y superavits presupuestarios con fines
anticíclicos, los servicios sociales no deberían financiarse como norma con
emisión de deuda pública. Sin embargo hace décadas que entramos en economías
crecientemente endeudadas, tanto a nivel público como privado de empresas y
familias. Ha sido esta deuda un arma recurrente del capital para generar
proyectos económicos y reflotar el consumo y de los estados para mantener los
sistemas del bienestar.
La
UE y otros países imponen una política presupuestaria de suficiencia financiera
excesivamente rígida. Las directrices de la UE en lo que respecta al gasto de
los estados vienen establecidas mediante los acuerdos de estabilidad y
disciplina presupuestaria, que mantienen el límite del déficit en el 3% y de la
deuda en el 60% del PIB. No obstante en nuestro país sobrepasamos ambos
límites, motivo por el que los partidos en el gobierno, presionados por la UE
hicieron el “cambio expres” de la Constitución introduciendo los criterios de
Estabilidad presupuestaria en su artículo 155, que obliga al estado a amortizar
en su plazo los acuerdos de deuda soberana pactada y los intereses, antes de
emplear recursos en proveer los servicios y prestaciones públicas.
Existe
una gran burbuja en la deuda de los países y mundial. Según el propio FMI, la
deuda global que suman familias, empresas, corporaciones y gobiernos, sin
contar las financieras, se ha situado en 132,4 billones de euros, esto equivale
al 225% del PIB mundial. Siendo la privada la mayor, a pesar de que los estados
gastaron billones de euros en los rescates de las entidades financieras (deuda de
los bancos)
Especialmente
problemático es el apalancamiento crediticio de los grandes inversores para
especular en bolsa, en los mercados no bursátiles y en los mercados secundarios
de deuda soberana.
La moneda única y
el tratado del Euro:
Los
criterios de estabilidad y disciplina presupuestaria son especialmente gravosos
para los estados del sur de Europa. El motivo es que los costos de su
financiación difieren sustancialmente de unos países a otros, debido a la
calificación crediticia que las agencias privadas de rating dan a sus deudas
soberanas al valorar su riesgo de impago. Países como Grecia, Irlanda o España
tienen una prima de riesgo mucho mayor lo cual incrementa sustancialmente los
costos de su financiación por medio de deuda soberana con respecto a países del
Norte de Europa. El hecho de que la moneda común sea el euro en la eurozona
impide que los países concretos puedan tener soberanía monetaria y ser con ello
autónomos en sus políticas económicas.
B.- Una
propuesta alternativa:
Dentro
del sistema capitalista, en el que el control del poder lo obstenta una
plutocracia del dinero u oligarquía económica, los grandes proyectos políticos
y sociales se pliegan a los intereses de dichas oligarquías, que, aunque a
menudo se asientan localmente, en la actual fase de capitalismo financiero son globales en su ejercicio.
Hoy
es constatable que esta plutocracia global del dinero -no llega al 1% - domina
con mano firme la economía, la política y la cultura; al mismo tiempo que
promueve en la opinión pública valores sistémicos. Con unos medios de
comunicación social bajo el control de corporaciones privadas, la ciudadanía
permanece desinformada y desimplicada en el ejercicio democrático y la acción
social más allá del voto cada 4 o 5 años. La sociedad crítica activa y
organizada social y políticamente representa a día de hoy una minoría de
ciudadanos y ciudadanas conscientes. Al respecto es significativo que una
mayoría de estos voten en la mayoría de países “democráticos” a partidos que defienden
en la oposición o ejercen en los gobiernos leyes y medidas económicas neoliberales.
Esto nos informa de que especialmente en los países desarrollados y en la
mayoría de países en vías de desarrollo la ideología neoliberal está instalada
en amplias esferas de la política, la cultura, las universidades, los medios de
comunicación de masas y en general en la opinión pública. Es lógico que hayamos
llegado al lugar donde nos encontramos: Las corporaciones dominan el Mundo.
Muchos,
desde la sociedad civil organizada, nos preguntamos cómo desarrollar una acción
política y social efectiva en el actual contexto neoliberal y financiarizado.
ATTAC hace tiempo que viene ejerciendo, en el ámbito internacional, una labor
pedagógica que ayude a los ciudadanos a conocer el actual contexto económico,
social y político, con la mirada puesta en construir proyecto político
ciudadano. Especialmente ahora cuando los gobiernos rinden sus armas al
capital, es la hora de la ciudadanía organizada para la acción social y
política y la estrategia para nosotros es la educación popular orientada a la
acción, ir tejiendo complicidades y redes ciudadanas entre las diversas
asociaciones y movimientos a nivel local e internacional para ir construyendo
el cambio colectivamente.
En
el actual sistema, se erige un eje de dominio, el fundamentalismo del mercado , sobre todos los demás (estado, sociedad, ecología, comunes,…etc). Los
neoliberales hicieron bien su trabajo, ahora la ciudadanía consciente y activa,
junto a las fuerzas políticas realmente críticas con el actual sistema, nos
enfrentamos a una ingente tarea ¿Cómo ir decodificando y deconstruyendo la
actual estructura sistémica neoliberal, tanto a nivel económico como político y
de valores?
En
las democracias pluralistas actuales, diversas a nivel social e ideológico,
cualquier proyecto de cambio ha de contar para avanzar con consensos básicos
construidos colectivamente entre las fuerzas críticas. Ello es necesario para
ir ganando espacios en la construcción de la hegemonía cultural y en la
conformación de la opinión pública. Desde la perspectiva de tejer redes de
consenso ATTAC está dispuesta a intercambiar puntos de vista, análisis y
diagnósticos y proyecto alternativo para ir construyendo red de acción social
ciudadana.
Las alternativas
estratégicas (no finalistas) de ATTAC en lo financiero:
En
primer lugar consideramos que a la hora de deconstruir ideológica y
prácticamente el modelo neoliberal hay que cuestionar sistemáticamente sus
principios, la privatización, la competencia, la desregulación, la libertad sin
cortapisas de los capitales y la opacidad. Para ello hay que vestir el proyecto
social y político de ciudadanía con los valores de lo público; la armonización,
cooperación y solidaridad financiera; reivindicar la regulación y control de
las finanzas, exigiendo en aras del ejercicio democrático la transparencia
financiera.
Regular
los mercados e instituciones financieras requiere:
·
Poner
límites a la titulización y a los productos derivados.
·
Aumentar
sustancialmente los requisitos de core capital bancario y controlar que las ratios
se hagan efectivas.
·
Una
nueva “ley Glass-Steagle” internacionalizada que separe la banca de depósito de
la de inversión.
·
Regulación
fondos diversos de inversión, aseguradoras, sociedades de inversión colectiva…
· Regulación
agencias de calificación crediticia privadas o crear nuevas agencias públicas a
nivel internacional.
·
Incrementar
regulación en bolsas de valores,
mercados de capital y no bursátiles.
· Erradicar
las prácticas desestabilizadoras de la ingeniería financiera para la economía y
nefastas para las sociedades, también las prácticas abusivas de los productos
derivados. La creación y comercialización de nuevos activos/instrumentos
financieros debería sujetarse a severos controles y estudios previos a su
comercialización indiscriminada. Las entidades financieras han de poder
demostrar sin atisbo de duda razonable que los inversores son conscientes de
los riesgos de los activos que les ofrecen depositantes, accionistas y
ciudadanos deberían tener más información y capacidad de control.
· Habrían
de regularse mejor las grandes corporaciones para evitar que asuman riesgos
excesivos en la busca de beneficios máximos. Los grandes bancos (demasiado
grandes para caer) habrían de ser fraccionados. En general para que sea
efectiva la libre competencia que el sistema dice promover, habría de ponerse
control a la formación de grandes oligopolios que dictan las prácticas del
mercado.
· Regular
los salarios de los directivos de las empresas, las comisiones, las stock
opcions y otras formas privilegiadas de remuneración.
Recuperar
el garantismo de lo público en la sociedad requiere:
·
Recuperación
del garantismo financiero mediante una banca pública, ética y con control
democrático y social.
·
Recuperar
las Cajas de proximidad, promover cooperativas de crédito y otros agentes
financieros locales.
· Apoyar
y promover la consolidación de la Banca ética y de cooperativas financieras
éticas y solidarias.
Construir
una Europa política, social y solidaria requiere:
· Cambiar
el Estatuto del banco Central Europeo: Que figure entre sus objetivos la
creación de empleo,que dependa políticamente de la UE, que sea el supervisor
máximo de las entidades financieras de la UE, que tenga entre sus funciones prestar
dinero directamente a los estados en caso necesario. Esta medida la
consideramos igualmente necesaria para la consecución de la tan manida unión
bancaria en la UE.
· Una
unión fiscal real, lo cual conlleva a la armonización fiscal en la UE, dotando
al mismo tiempo de una mayor progresividad a los sistemas fiscales por razones
de equidad. Ello implica tipos marginales crecientes al IRPF y bienes de lujo y
evitar la evasión y la elusión fiscal (SICAVs, beneficios fiscales
injustificados, tolerancia con los refugios fiscales) y la equiparación de las
cargas fiscales del capital a las del trabajo.
Transitar hacia un nuevo modelo económico productivo social y ecológico requiere:
·
Algo
fundamental es acabar con la especulación cortoplacista con todo tipo de
activos, es necesario disuadir las actividades especulativas con impuestos
similares al ITF (Impuesto a las Transacciones Financieras). Ello lo
consideramos absolutamente necesario para combatir el sobredimensionado poder
de las finanzas sobre la economía. Es este uno de los aspectos claves como responsable
de la falta de planificación democrática en economía, lo cual hace inviable la
transición social y ecológica.
· Combatir
la opacidad financiera. Para ello hay
que dotar de mecanismos de transparencia y regulación a los sistemas de
transferencia financiera (Swift), a las cámaras de compensación interbancaria y
al sistema de pagos internacional. Y algo imprescindible, erradicar los refugios
fiscales o centros offshore, que hacen inviable el estado social y democrático
de derecho y socavan la democracia.
· Existen
diversos mecanismos para combatir políticamente a nivel local las actividades
de fondos de inversión, socimis y otros agentes dedicados a la especulación
inmobiliaria. Uno fundamental puede ser el de obligar por ley u ordenanzas a
que se pongan en alquiler las viviendas desocupadas, estableciendo sanciones en
caso contrario.
· En
caso de inviabilidad en el corto plazo de suprimir las actividades
especulativas con activos financieros “peligrosos”, uno de los objetivos podría
ser acotar el “casino financiero” de forma que su actividad permita la búsqueda
de beneficios entre sus usuarios, pero que sus efectos no
afectaran/desestabilizasen la economía real. (P.ej., para empezar, separación
de la banca de depósito de la de inversión)
· Auditar
la deuda odiosa e ilegítima: La deuda es sobre todo un problema político, no
económico, en este sentido existen diversas alternativas que también suponen
decisiones políticas, como son el impago de la deuda odiosa e ilegítima, la reestructuración
de la deuda acompañada en su caso de quitas. También es una opción federar la
deuda a nivel internacional, por ejemplo en la UE.
· Crear
alternativas sociales de trueque, monedas locales con control democrático y de
las haciendas públicas, etc.
·
Que
se cumplan los criterios sustanciales de la transición ecológica en el sistema
productivo.
La lucha por que las finanzas sean un bien común y dejen de estar al servicio de los poderes económicos, consideramos que es una condición necesaria para que los servicios y prestaciones públicas propias del estado de derecho, la transición ecológica, la igualdad de género o el derecho a un trabajo digno y socialmente responsable sean posibles. En este sentido y conscientes de que es necesario organizar la lucha de las trabajadoras y trabajadores y de la ciudadanía responsable con la democracia y el planeta en su conjunto, contra los poderes financieros, queremos promover un debate para organizar más eficazmente las luchas de resistencia contra el capitalismo financiero, eso sí con consenso, acción conjunta y proyecto.
ATTAC
ACORDEM
Junio
2018
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